MI OPINIÓN:
Máximo Huerta recoge en este libro los artículos que ha ido publicando en diferentes periódicos como "El español" o "20 minutos".
En este libro nos muestra tanto su faceta íntima, hablándonos de su madre, de su infancia pasada en Utiel, de sus veranos en Vinaroz, de sus sobrinas, de su perra Doña Leonor o de su hermana; como de temas de actualidad. Huerta es un excelente columnista que sabe sacar oro de, por ejemplo, su obsesión y dependencia del móvil. Nos habla de televisión o de libros, todo ello acompañado por sus dibujos.
Los que le seguimos en sus redes sociales, sabemos lo que le gusta sentarse en un café y dibujar (a poder ser, con sus acuarelas) pequeños bocetos: una flor, una taza, un balcón...
Una de las cosas que más me han gustado del libro es cómo habla, muy de soslayo, de su etapa como Ministro de Cultura (como se definió en la entrega de los Goya 2018, "Máximo, el breve") y de cómo pasaron esos días en los que se provocó su dimisión. De cómo se le juzgó desde un principio por haber trabajado con Ana Rosa Quintana. Pero habla sin ironía o rencor "aparente".
Sinceramente, Máximo Huerta escribe un manual para montar un mueble de IKEA y me lo compro sin dudarlo.
Este libro se lee fácil, te deja con ganas de más, con ganas de conocer un poco más al pequeño Maximo.
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