MI OPINIÓN:
Una madre y una hija pasean por las calles de Nueva York agarradas del brazo y conversan sobre sus cosas. Mientras recorren las calles de Manhattan van rememorando la infancia de la niña, criada en una familia pobre, judía y comunista y la vida de las vecinas con las que compartían su día a día en un edificio del Bronx. Pero a medida que vamos avanzando por las páginas de estas memorias, vemos que esas conversaciones están llenas de acidez, de resquemor, de desdicha y de sentimientos ocultos entre ellas.
"Una de las dos va a morir a causa de este apego"
La autora nos cuenta cómo su madre enviuda muy joven y decide que va a sufrir para siempre por la falta de su marido y se convierte en un ser depresivo que influye de manera tóxica en la existencia de su hija. Toda esa toxicidad se plasma la manera en la que intenta inculcarle cómo lo único importante en la vida es encontrar el amor y casarse.
Pero Gornick (reconocida activista por los derechos de las mujeres), tiene otra idea de esa manera de vivir el amor y nos relata las relaciones con diferentes hombres. En muchos pasajes de estas memorias vemos como su madre se enfurece e intenta destrozar con sus palabras a su hija, que demuestra mayor inteligencia que ella y eso la come por dentro.
"- Le tengo envidia - me espeta mi madre -. Le tengo envidia porque vivió su vida. Yo no viví la mía."
Gornick es una periodista y escritora que nació en el Bronx en 1935 y a través de estas memorias nos cuenta su vínculo madre-hija y cómo vivió en una atmósfera agobiante ya que la relación con su madre le aprisionaba.
En cierto modo, recuerda a novelas como "La casa de Bernarda Alba" donde la madre tiene un papel poderoso, fuerte, dominante...
Desde mi punto de vista, estas memorias son como una catarsis para Gornick, ya que habla de su madre con crudeza y con cariño a partes iguales. Hay fragmentos muy duros y muy complicados de leer dado el carácter difícil y la lengua bífida de su madre.
“Sé que arde de rabia y me alegra verla así. ¿Y por qué no? Yo también ardo de rabia. Pero paseamos por las calles de Nueva York juntas continuamente.”
Las relaciones entre madres e hijas son universales y creo que en muchos puntos, mujeres que lean este texto se pueden sentir identificadas con la relación entre madre e hija.
Desde mi punto de vista, es un libro imprescindible que toda mujer debería leer.
Elvira Lindo (a la cual adoro), escribió esta reseña en “El País” que merece la pena ser leída.
SOBRE LA AUTORA:
Vivian Gornick (Bronx, 1935) es una de las más reputadas escritoras memorialísticas de los Estados Unidos. No sólo por su notable libro “Apegos feroces”, que finamente Sexto Piso se ha encargado de verter al castellano, sino por sus textos teóricos al respecto. También es una de las más destacadas escritoras feministas desde que en su artículo para Village Voice «The Next Great Moment in History Is Theirs» colocara al grupo New York Radical Feminists bajo la atención mediática. Su libro más reciente es “The Odd Woman and the City”.
(Fuente: http://revistapenultima.com/)
Oh, Anabel. Este libro me gustó muchísimo y creo que lo has descrito a la perfección. ¡Muchas gracias por compartirlo! :)
ResponderEliminarEs que está tan bien descrita esa relación madre / hija...
EliminarMe alegro mucho de que te haya gustado.
¡Beso!